ESCAPAR
La semana pasada me hicieron una pregunta que necesitaba ayuda para responder. Un amigo local había recibido una orden de evacuación de emergencia de la compañía eléctrica por una fuga de gas en el complejo de apartamentos.
Publiqué el mensaje que había recibido y pedí consejo a los guardianes de gatos en línea.
Mi amigo escribió: “¿Has escrito un artículo sobre los mejores transportadores para gatos? Franny puede desabrochar los de tela. Ayer tuvimos un susto de fuga de gas e intenté reunir a los gatos para sacarlos. Puse a Franny en una funda de almohada, e inmediatamente ella hizo un agujero con sus uñas y escapó. Estoy agradecido de que Avista nos haya dado el visto bueno porque no pude recogerlos de forma segura”.
Pregunté a los tutores de gatos sobre los transportadores para gatos a prueba de escapes:
“Las posibles emergencias que implican evacuaciones, como fugas de gas, incendios e inundaciones, sin mencionar los viajes repentinos al veterinario para recibir atención médica inmediata, pueden implicar lo que debería ser un transporte seguro (y lo más cómodo posible) para su gato o gatos. ¡Necesitarás un transportador a prueba de escapes! ¿Qué recomendarías?"
Estas son algunas de sus sugerencias:
Harve Morgan (California) La mayoría de la gente espera hasta que surge la necesidad de sacar el portabebés. Comience con su mascota familiarizándola con el transportador. Deja el transportín afuera para que lo vean con normalidad. No espere hasta que sea una necesidad. Durante los incendios de 2003 en San Bernardino, muchos perros y gatos tuvieron que ser tranquilizados durante las evacuaciones porque nunca habían estado en una perrera o transportadora. Los que habían estado antes se relajaron y lograron salir adelante.
Jill Gibbs (Montana) En mi opinión, una caja rígida sería la mejor opción. Si prefiere una caja blanda, consiga una con un clip en la parte superior donde termina la cremallera.
Teri Stripes (Washington) Lo mismo ocurre. Nuestras cremalleras se enganchan en nuestros transportadores de lados blandos, por lo que probablemente nuestros gatos no se hayan escapado. Pero hay seis cremalleras y temo olvidarme de cerrar una o dos.
Los gatos, al igual que los perros, pueden salir de muchos transportines si se esfuerzan lo suficiente. Dicho esto, al igual que los perros, si crías bien a los gatos o los condicionas para que no odien una jaula o jaula/contención, serán muy buenos. Actualmente contamos con transportadores de lados blandos con correas que no rayan. A los dos chicos les desagradan mucho. Así que la próxima vez que los usemos también tendré una pista sobre los chicos en caso de que se escapen. Si hay algún transportín infalible para un gato, serían las jaulas de las aerolíneas VariKennel de la vieja escuela.
Micha Michlewicz (Maryland) Las cajas rígidas son las mejores. Es ideal condicionar al gato a un transportín antes de que necesites usarlo. Emparejar cosas geniales con el transportador y dejarlo abierto acondicionará orgánicamente la caja para que sea un lugar seguro y agradable. Cuando un gato se siente cómodo, las opciones de jaulas se abren y se pueden considerar de forma segura las de lados blandos.
Frances Dauster (Alabama) Dios mío. Me recuerda a cuando emigré a Estados Unidos. Mi gato destrozó el transportador a 30,000 pies y se volvió loco con los medicamentos que el veterinario me pidió que le diera "para sedarlo". JAJA, JAJA, la broma era mía. Nueve horas y 45 minutos de siameses gritando en clase ejecutiva. Mis tres hijos, de 7, 7 y 6 años, fueron fáciles. ¿El gato? No tanto. Era un portaaviones reforzado de Lufthansa. Terminamos bombardeando a Bumble (Bumble Bee era su nombre) en dos bandejas de servicio de alimentos unidas con cinta adhesiva de riesgo biológico... ¡Dios mío!
Funda de almohada Sandee Strobel Szabo (Virginia). Así nos recomendó un veterinario que trasportáramos a nuestro gato hasta ellos. Recomendó poner al gato en una funda de almohada de algodón y colocar a nuestro gato, en la funda de almohada, en nuestro regazo cerca de nuestro estómago para escuchar y sentir nuestra respiración y los latidos del corazón.
Jenny Beard Biehunko (Alabama) Me encantan los Sleepypods. Utilice la parte inferior como cama diaria para gatos para su gatito y simplemente cierre la parte superior con cremallera cuando esté listo para salir. De esa manera, se siente y huele como "hogar".
Stephanie Presdee (Reino Unido) Cuando teníamos un criadero, nuestro consejo fue que acostumbrara a su gato a la caja transportadora y rociara la ropa de cama con Feliway o algún relajante similar. Traiga su ropa de cama y sus tazones habituales, y como estábamos en España y había tantas opciones dietéticas de comida para gatos, cobramos menos y dijimos que trajeran su comida habitual. Uno de Arabia Saudita comía pescado crudo... que tenía que destripar fresco todos los días. Déjeles usar la caja como cama en casa; la hierba gatera ayuda. Nunca confíes en los clips; Utilice siempre un pequeño candado o corbatas adicionales. Cuando recogíamos gatos de los clientes en el aparcamiento, siempre llevábamos la zona frontal de alambre/malla hacia nosotros. Teníamos criaderos con doble puerta, por lo que estábamos a salvo.
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Características importantes a considerar al comprar un transportín para gatos nerviosos
El número de puertas. Si bien es fácil entrar a algunos gatos tranquilos por las pequeñas puertas laterales que se ven en la mayoría de los transportadores para gatos, ¡es posible que ese no sea el caso de un gato nervioso! Las puertas superiores ofrecen una gran alternativa ya que suelen ser más grandes. También es mucho más fácil colocar a tu gato directamente en un transportín desde la parte superior, en lugar de intentar meterlo en una pequeña puerta desde un costado.
Correa interna. Esto es algo que nos gusta ver en los transportines diseñados específicamente para gatos nerviosos. Si la respuesta de huida de su gato se activa mientras lo transportan, puede ser una gran preocupación que intente liberarse tan pronto como abra la puerta. Si seleccionas un transportador para gatos con correa interna, puedes engancharlo al arnés de tu gato. De esa manera, cuando abras la puerta, sabrás que todavía están sujetos de forma segura a la correa y podrás soltarlos. Por supuesto, te recomendamos asegurarte de que tu gato esté completamente entrenado para usar un arnés antes de intentar esto, y solo debes realizar viajes más cortos, donde tu gato esté completamente monitoreado.
Ventilación. Si bien todos los transportines para gatos deben estar completamente ventilados, a algunos gatos nerviosos les gusta poder ver lo más posible hacia afuera. Si eso le suena a su gato, entonces algo como un transportador de lados blandos con muchos paneles de malla le quedará bien. Por otro lado, algunos gatos nerviosos prefieren un área donde puedan “esconderse”, en cuyo caso es una buena idea un transportador rígido con una sección que no tenga orificios de ventilación en ese lugar.
Aprobado por la aerolínea. Si desea viajar en avión con su gato nervioso, asegúrese de seleccionar un transportador para gatos que haya sido aprobado para su uso por las principales aerolíneas. Suelen ser un poco más pequeños, con unas dimensiones que se adaptan al tamaño del equipaje de mano.
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¿Cuál es la diferencia entre transportadores duros y blandos? Los transportadores rígidos para gatos están hechos de plástico rígido y tienen puertas de malla de alambre o de plástico. Son muy resistentes y generalmente se aceptan como la forma más segura de transportar a tu gato porque es mucho menos probable que pueda escapar. Sin embargo, son pesados y, a veces, demasiado grandes para ser aceptados como equipaje de mano en una aerolínea.
Los transportadores blandos se parecen a una bolsa de viaje, pero tienen secciones de malla para ventilación y para que su gato pueda ver hacia afuera. Muchos transportadores blandos están aprobados para el equipaje de mano en aerolíneas y también pueden fijarse de manera segura a los asientos de aviones y automóviles. Sin embargo, los lados de malla suave no siempre son lo suficientemente resistentes como para resistir los rasguños y mordiscos de un gato decidido.
Los transportadores tipo mochila son otra opción, que le permite llevar a su gato en la espalda. Suelen tener una sección delantera rígida con una parte trasera de tela más suave. Son ideales para viajes cortos o incluso si quieres llevar a tu gato a pasear, pero normalmente no son lo suficientemente grandes como para permitir que tu gato grande se recueste.
¿Debo comprar un transportín duro o blando? ¡Esto depende de tus preferencias personales y de las de tu gato!
Si bien los transportadores rígidos son más seguros, son difíciles de almacenar cuando no están en uso y no se pueden llevar a bordo de los aviones. Algunos gatos prefieren la seguridad de estar dentro de un transportador rígido cuando viajan.
Los portabebés blandos son excelentes para viajes en avión, ya que muchos de ellos están aprobados para su uso en la cabina del avión. Son fáciles de transportar y se pliegan para guardarlos cuando no están en uso.
En última instancia, ¡es mejor probar ambos si es posible! Es posible que puedas pedirle prestado uno de cada uno a un amigo antes de invertir en uno tú mismo. Nos gusta usar cada uno de estos tipos de transportadores para diferentes propósitos (¡y para gatos!), así que tenga un par de cada uno, tanto duro como blando.
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Haciéndolo divertido: cómo ayudar a su gato a acostumbrarse al transportador para gatos
En lugar de engatusar o maltratar a tu gato para que entre en la jaula cuando llega el momento de ir al veterinario o de viaje, ¿por qué no ayudarlo a disfrutarlo? A continuación se muestran algunas formas de hacer que el tiempo en el portaaviones sea más divertido.
Preséntelo como una cama Deje el transportín en una parte apreciada de su casa, coloque mantas familiares o una almohada dentro y deje que su gato lo use como cama o escondite. Para el día del viaje, su gato debería estar familiarizado con el transportín y considerarlo una extensión reconfortante de su hogar.
Si bien algunos transportadores son plegables y fáciles de deslizar en el estante superior de un armario cuando no están en uso, no recomiendo esta práctica por varias razones.
Si un transportín permanece doblado y guardado en estantes la mayor parte de los días del año, su gato nunca lo conocerá fuera de situaciones estresantes. Si no lo ve hasta cinco minutos antes de que lo lleven al auto, su gato inevitablemente asociará el transportín con ese evento estresante.
En segundo lugar, tener un transportín para gatos a mano es un aspecto importante de la preparación para emergencias. Si necesita evacuar su casa repentinamente, debería poder meter a su gato en su transportador e irse.
Dale un aroma familiar Como se mencionó en el consejo anterior, los aromas familiares ayudarán a tu gato a suavizarse hacia el nuevo transportín. Al colocar mantas, toallas, una cama para gatos o incluso tu propia ropa dentro del transportín, le dices a tu gato "esto es tuyo".
Utilice un spray de feromonas Si todo va bien, su gato acabará marcando el transportín con sus propias feromonas faciales. Mientras tanto, puedes utilizar un spray de feromonas sintéticas para calmar a tu gato e identificar el transportín como un lugar seguro.
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Cómo acostumbrar a tu gato al transportín
Primero, brinde a su gato una introducción muy gradual tanto al transportín como a la experiencia de ser transportado dentro del transportín. Incorpore su instinto natural de sentirse seguro agregando ropa de cama suave y familiar en su transportador. Los gatos consideran seguro un espacio pequeño y acogedor, casi como un capullo o un saco de dormir. Lo vemos todo el tiempo cuando juegan y se esconden en bolsas o cajas. Cualquier operador que utilice debe brindarle la misma sensación de seguridad.
Otro consejo importante es hacer que el transportín de su gato forme parte del “mueble” normal de su hogar para que le huela familiar. Esto ayuda a que el portador no sea tan aterrador y elimina su asociación con experiencias negativas. Si no es posible trasladar el transportador a las áreas de vida habituales de su gato, colóquelo en su casa al menos 24 horas antes de que planee transportar a su gato. El sentido del olfato de un gato supera con creces al de los humanos. Para tu gato, existe una gran diferencia entre los olores de la sala de estar y los olores de tu garaje o sótano.
Finalmente, uno de mis consejos favoritos es servirle a su gato sus golosinas, comida o hierba gatera favorita en el transportador. Probablemente le encantará de inmediato. Simplemente colocar los juguetes favoritos de su gato en el transportín y dejar la puerta cerrada puede hacer que sea mucho más amigable para su gato. Una vez que se sienta cómodo dentro del transportador, puedes intentar mover su ubicación unos centímetros. Si su gato tolera el movimiento, intente moverlo unos metros o incluso colocar el transportador en una silla para satisfacer el deseo de su gato de tener una "ventaja vertical". Una vez que tu gato se sienta totalmente cómodo con el transportín, incluso podrás llevarlo afuera. Esto simula lo que sucederá cuando lleves a tu gato en su viaje anual o semestral a la clínica veterinaria para mantenerlo sano.
Entonces, en resumen:
1. Comience a entrenar con transportador cuando su gato sea joven.
2. Integre el transportador en su hogar tanto como sea posible, idealmente creando un lugar de descanso normal.
3. Coloque golosinas, juguetes y hierba gatera en el transportador.
4. Coloque la ropa de cama familiar o una toalla en el portabebés.
5. Sea paciente. Si su gato siente que el transportín es inusual, actuará en consecuencia.
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Foto de Val Hughes
Mi familia viajaba con nuestros gatos cuando yo era niño, incluidos viajes por carretera con pernoctaciones en moteles. Su transportador era típico de las décadas de 1950 y 1960, una caja resistente de un material de cartón duro, con un asa y orificios de ventilación en la parte superior. No es exactamente “seguro” según los estándares actuales, pero funcionó bien para los gatos y para nuestra familia. (Nunca tuvimos un accidente).
He usado un VariKennel #100, el tamaño más pequeño, desde que compré por primera vez VariKennels #400 para mis perros. El #100 se puede sujetar con un cinturón de seguridad a través de su asa y puede viajar en el asiento del pasajero. Se puede colocar con la puerta en posición vertical y abierta, lo que a menudo hace que sea más fácil dejar caer a un gato con cuidado, evitando la lucha habitual cuando intentas empujarlo y cerrar la puerta cuando la jaula está en su parte inferior. Confío en la seguridad de los perros en VariKennels y también confío en la seguridad de un gato.